Queda la sensación de que el aplanamiento y caída de la curva de contagios que sí logró Alemania y no logró Chile, se explican -culturalmente- porque en Alemania los ciudadanos siguieron meticulosamente las normas de confinamiento.
El estallido social de octubre pasado golpeó fuertemente al país, pero todavía no está claro cómo esta realidad empeorará a partir de la pandemia y el establecimiento de cuarentenas.