Reemplazar la relación real por la virtual puede llevarnos penosamente hacia la creación de una generación aislada, autómata e individualista, cuyas relaciones serán más bien prácticas y basadas en principios de conveniencia.
Las manifestaciones estadounidenses no son sólo un reclamo de justicia para George Floyd, sino que también son un reclamo que busca la reparación de esta memoria colectiva de injusticia racial.