Subir la tasa del diésel para igualarla a la de las gasolinas es una medida técnicamente correcta, aumentan la eficiencia en la economía y además generaría una recaudación importante.
Con el pretexto de la lucha contra el terrorismo se abrió una caja de pandora que ha sido denominada, incluso por las fuerzas armadas británicas, como “la guerra inganable”.