Si hay algo que no le interesa a PMI es la salud de la población, fumadora o no. El tabaco mata 6 millones de personas por año a nivel mundial y PMI es la responsable de buena parte de esas muertes.
En un estado democrático y serio, se espera que las instituciones puedan ponerse de acuerdo, sin generar un trauma social ante cada decisión, con muestras de respeto de uno u otro lado, sobre todo en un tema como el que está en cuestión.
Esto ha pasado a ser, lo queramos o no, parte de la historia contemporánea de la educación pública en Chile. Pero seguimos haciendo caso omiso a esto. No lo queremos ver.
Una ministra que decide políticamente irse al norte a ver el eclipse solar, aun cuando haya estado planeado con antelación, no pasará inadvertida y la ciudadanía le cobrará el desliz.