Es urgente tratar estos temas como sociedad integrando el conocimiento y la voz de distintos actores, porque no se sabe cómo lograr un equilibrio en estos nuevos mercados otorgando flexibilidad laboral a las miles de personas que participan en ellos, de forma justa, no precaria.
Las calificaciones muestran que las plataformas en Chile aún están lejos de garantizar condiciones laborales básicas para los trabajadores. Por ello, urge comprender los efectos de esta transformación de la economía de las plataformas en su totalidad.
Ninguna plataforma pudo aportar pruebas de políticas concretas y coherentes destinadas a proteger a los trabajadores de cualquier tipo de riesgo en el desarrollo de sus actividades.
Es fundamental visibilizar las prácticas y subjetividades de quienes son la fuerza laboral detrás de estas plataformas, las cuales reflejan una serie de desigualdades bajo el lema de la innovación y el emprendimiento.