Mucho antes de que Joya Plástica fuera una empresa sustentable destacada en diversos medios nacionales; antes de que tuviera un crecimiento explosivo de ventas en Internet; antes de que como empresa familiar buscaran un equilibrio entre negocios y medio ambiente, antes incluso, de que la familia Álvarez- Calderón viviera en Holanda el 2005 y se maravillara con el desarrollo del reciclaje doméstico de ese país, la bisabuela de Constanza Álvarez, (Ingeniera Comercial UAI, Magíster en Innovación y Diseño) tejía a crochet, -en la década de los 80-  canastos con bolsas plásticas de colores que repartía en hospitales para que los enfermos guardaran sus remedios. Esa semilla original, esa idea se fue desarrollando a lo largo de los años, traspasando su técnica, aplicaciones y creatividad a las siguientes generaciones de su familia. “Yo cuando chica dibujaba y mi abuela  y mi mamá potenciaban lo que yo hacía. Una navidad mi mamá me regaló 60 lápices de colores, hasta hoy, es el mejor regalo de navidad que he recibido,” cuenta María Pía Calderón, diseñadora gráfica y mamá de Constanza.

María Pía Calderón comenzó a innovar con la técnica heredara de su abuela, desarrollando – hace varios años ya, cuadros elaborados a partir de bolsas plásticas, lo que luego derivó en orfebrería.

Pero, ¿Qué es lo que hace Joya Plástica hoy en día? Son una empresa familiar que desde el diseño y reutilización de bolsas plásticas crea joyas de autor únicas y hechas a mano. Conoce más AQUÍ.

Joya Plástica

María Pía es artista. Le gusta experimentar, investigar, pero siente que Joya Plástica como tal, nació cuando Constanza decidió involucrarse, después de egresar del Magíster en Innovación y Diseño de la UAI el 2014. “No era mi plan entrar a Joya Plástica cuando ingresé a estudiar Ingeniería Comercial,” dice Constanza. “Pero luego pensé que si no lo hacía yo no lo iba a hacer nadie. Era un tema familiar, tiene muy buen feedback y eso ayuda mucho, pero de que ha costado, ha costado un montón, recién ahora puedo decir que estamos bien y creciendo mucho. Empezamos desde abajo, sin ganar ni uno.” María Pía reafirma esta opinión de su hija: “Yo quizás habría estado un rato con las joyas y me hubiera ido a otra cosa, los artistas somos, más dispersos, tenemos distintos ritmos, ella es más ejecutiva, concreta las cosas,” explica. “Si bien ya estábamos constituidos como empresa por un capital semilla, la Constanza armó el proyecto. Lo empezamos a tomar muy seriamente. Mi otra hija, que es periodista, contribuyó en el área de la difusión,” cuenta María Pía. Hoy, son 3 las mujeres que trabajan full time en este emprendimiento, entre ellas María Pía Calderón y Constanza Álvarez y otras tres personas contribuyen con su trabajo part time, incluida Pía Alvarez, la hermana de Constanza, quien maneja las comunicaciones.

Constanza Álvarez (tercera de iz. a der.), su mamá María Pía Calderón (cuarta de iz. da der.) junto a parte del equipo de Joya Plástica.

El Crecimiento

Desde que en noviembre del año pasado renovaron la página web de Joya Plástica, las ventas aumentaron en un 300%. También venden físicamente en distintas ferias en las que participan, pero el fuerte es por internet. Las redes sociales son fundamentales para su negocio.

– Constanza ¿Cómo se proyectan a corto plazo?

Queremos exportar sí o sí, está dentro de nuestro plan de crecimiento. Y también buscar otros puntos estratégicos dentro de Chile.

– ¿Qué fue lo más difícil de embarcarte en este proyecto?

Generar un ritmo, aprender a emprender, eso es lo más difícil. Uno no sabe, no hay tanta ayuda, todo es engorroso, no hay lugares donde te puedan dar soporte, cada uno aprende individualmente. Postular a fondo es complicado, todo es complicado. Lo mejor para Joya Plástica fue postular a fondos a través de una aceleradora de Negocios, Mujeres Empresarias, que además tienen una gran red de contactos.

Estar en contacto con otros emprendedores es súper importante, porque es ahí donde se va moviendo todo, entiendes lo que se está haciendo, cuáles son las tendencias, comienzas trabajar con otros emprendedores. Nos potenciamos mutuamente.

– ¿Qué le dirías a quienes buscan emprender?

Que hay que ser demasiado perseverantes. También que el equipo importa mucho. Hay que armar un buen equipo y creer en tu idea. Probar. Muchas veces hay ideas que no funcionan, pero hay seguir observando. Si uno ya tiene el bichito de emprender, hay que hacer el mismo ejercicio de nuevo, porque el aprendizaje no se pierde.

– ¿Qué significa para ustedes trabajar con desechos? ¿Le da esto un valor distinto a su empresa?

Es muy bacán cuando la gente se acerca, y nos pregunta de qué están hechas las joyas. Las personas quedan impresionadas al ver lo que se puede hacer con los desechos, que se pueden hacer joyas tan lindas con bolsas plásticas. Es como abrirle la mente a la gente, eso lo que más me gusta.

– ¿Qué aprendiste en el Magíster en Innovación y Diseño?

En ese Magister te resetean la cabeza. Te enseñan a pensar las ideas, a desarrollar proyectos, en volar la mente. El magister te da desafíos: de pensar, de tomar decisiones, de mirar el entorno, de observar y volver a observar. Salir del entorno es lo que te permite innovar, salirse de la burbuja en la que está todo el mundo.

* Fotos: Gentileza Joya Plástica.