Estudiantes de Ingeniería en Diseño UAI participaron de la charla “Casos de casas”, en la que expuso Felipe Assadi, Decano de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad Finis Terrae, arquitecto y Magíster en Arquitectura de la Universidad Católica de Chile, y quien en 1999 recibió el Premio Promoción Joven del Colegio de Arquitectos de Chile, otorgado al mejor profesional de la disciplina del país menor de 35 años.
Assadi ha sido profesor en diversas universidades chilenas y extranjeras, en México, Brasil, Italia, Colombia y Estados Unidos. Su obra también se ha construido en diferentes países. El arquitecto comenzó destacando el privilegio de los estudiantes UAI de estudiar en el campus de Peñalolén. “Es una arquitectura maravillosa”, dijo.
Felipe Assadi, arquitecto chileno.
Durante la charla, mostró distintas casas que ha diseñado y construido, además de las maquetas previas a la ejecución del proyecto, cuyos formatos son de una amplia variedad: circulares, triangulares y rectangulares, entre otros. Explicó que existen variables objetivas y subjetivas en un proceso de diseño. “La multiplicidad de variables es relevante”, señaló, destacando el equilibrio que requiere una estructura.
También abordó los desafíos que implica construir en otros países. “Hay que construir un lenguaje universal. Cuesta mucho adaptarse a las materialidades o nombres de otros países. Hay que tener un cambio de mentalidad de estrategia y diseño cuando uno hace algo fuera de Chile, entender cómo operan, respetando la naturaleza del material”, comentó.
En este aspecto, señaló que el chileno tiene una capacidad intrínseca para reinventarse. “Siempre hemos operado solos por el escenario geográfico: pampas, océano, cordillera. Uno trae una idea de fuera, pero la adapta”, dijo.
Assadi también abordó el impacto del uso de la tecnología en proyectos de arquitectura. “Creo que no ha incidido mucho en el resultado final del proyecto, sino en la elaboración y entendimiento del proyecto. Donde más nosotros hemos incorporado tecnología es en la visualización y en las plataformas de desarrollo, ya sea en 3D, introducir el proyecto en el metaverso y, con los oculus, meterse y que el cliente se sienta de verdad dentro y entienda la escala. Esto te permite una serie de cosas, de toma de decisiones, de programación, logística, materiales, incluso de estructura”, explicó, destacando que las tecnologías facilitan muchas cosas y acortan los tiempos de desarrollo.
“Lo que la tecnología hace es acercar a la persona o cliente a ver el proyecto de una manera más concreta en la etapa inicial. Chile no es un país que tenga industrializado ciertos procesos de construcción digital. Existen, pero no a nivel masivo”, indicó.
Sobre la formación UAI, el arquitecto destacó el valor agregado de la innovación curricular que une a disciplinas muy diferentes, como la ingeniería civil y el diseño. “Eso abre campos en múltiples direcciones. Por otro lado, han hecho un gran esfuerzo y logro en innovación tecnológica para que este programa se pueda llevar a cabo. Ahora hay que sentarse a esperar productos, y eso es una cosa que nos tiene a todos con los ojos muy abiertos”, concluyó.