Dialogar con el pasado para comprender el presente e imaginar el futuro

6 de Agosto 2020 Noticias

En medio de la crisis sanitaria que azota a la humanidad, han surgido una serie  de incertidumbres que han encontrado dentro de sus respuestas volver a estudiar  los hechos que ha ocurrido en un tiempo anterior,  lo que ha revalorizado la teoría de la historia.

Para tratar esta temática, el Departamento de Historia y Ciencias Sociales y Departamento de Filosofía de la Facultad de Artes Liberales (FAL) organizaron el Seminario “Cronos atribulado. El pasado, el presente y el futuro desde la teoría de la historia” donde expusieron sus trabajos dos de los autores más importantes de esta área de investigación: la Dra. María Inés Mudrovcic, UNCo-IPEHCS-CONICET (Argentina) y el Dr. Fernando Betancourt, UNAM (México).

Una vez expuestas sus investigaciones, estas fueron comentadas por los organizadores: el Dr. Rodrigo Escribano, académico titular de la Universidad Adolfo Ibáñez y el Dr. Daniel Ovalle, académico de la  Universidad Adolfo Ibáñez/Universidad Andrés Bello.

“Necesitamos reformar nuestro diálogo con el pasado para entender mejor el presente e imaginar nuevos futuros”, sostiene el académico UAI y co-organizador del seminario, Rodrigo Escribano, quien agrega superadas las filosofías de la historia teleológicas, la reflexión sistemática de la historicidad de las relaciones humanas y del propio trabajo historiográfico, han devenido en una serie innovadora de trabajos, simposios y redes en todo el mundo.

Para Ovalle y Escribano, el  propósito de este seminario fue dar cuenta de algunas de las claves para enriquecer el trabajo del historiador y la amplia gama de disciplinas y actores sociales que se aplican a la interpretación del pasado: “el acto aspiró a ofrecer herramientas historiográficas para una mejor comprensión del mundo contemporáneo, lugar de producción del conocimiento histórico actual”.

Los organizadores del evento cuentan que si bien ninguno de los dos habían iniciado investigaciones en este campo, siempre tenían en mente preguntas como ¿para qué sirve la historia?, ¿cómo lidian las sociedades humanas con sus múltiples pasados y que influencia tiene esto en sus futuros?, ¿cómo nos relacionamos con el tiempo histórico?: “Son cuestiones fundamentales para el historiador, pero también para el conjunto de la sociedad. Al final, la teoría de la historia es una reflexión en torno a estas cuestiones”, sostienen.

La razón principal que motivó a la realización de este Seminario fueron las incertidumbres generadas por la crisis del coronavirus que han suscitado más interés que nunca en torno a la condición histórica del mundo que habitamos. “Todos nos preguntamos si nuestras sociedades progresan o caminan al desastre, y si las normas, instituciones y tecnologías que antes nos funcionaban siguen siendo válidas para el mañana”, afirman los académicos chilenos.

El seminario abordó dos vías complementarias. Por un lado, se habló de cómo el coronavirus está alterando nuestras percepciones temporales (“Estamos transitando de una era presentista a una que va a recobrar su sentido histórico: la certeza de que todo puede y debe cambiar”, afirman Escribano y Ovalle); y por otro lado, se habló del papel que puede tener el conocimiento histórico en esta nueva coyuntura.

Para ambos académicos, los historiadores,-que son los profesionales a los que las sociedades modernas les han asignado la responsabilidad de interpretar el pasado-, tienen un papel muy relevante. “En la medida en que los tiempos cambian y se problematizan las claves para afrontar el futuro, es necesario plantearle nuevas interrogantes al pasado para poder diagnosticar mejor nuestro presente”, reflexionan.

El encuentro se enmarcó dentro de las Jornadas Internacionales de Filosofía y Teoría de la Historia que la Facultad de Artes Liberales organiza desde el año 2004. “El seminario, dentro de su modestia, fue un peldaño más en los esfuerzos académicos y editoriales que está haciendo la FAL para situarse como uno de los centros de vanguardia en la reflexión interdisciplinar en torno a la teoría de la historia en la región y en el mundo”, concluyen sus organizadores.

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