Como parte del “Programa de fortalecimiento de capacidades regionales en materia de análisis de información territorial para la toma de decisiones”, desarrollado por la Subsecretaría de Desarrollo Regional y el Centro de Inteligencia Territorial de la Escuela de Diseño de la Universidad Adolfo Ibáñez (CIT-UAI), se realizó en Chillán el seminario “Desafíos del bienestar humano en el territorio durante la descentralización”.
La actividad, que fue transmitida vía streaming, se transformó en un espacio de diálogo entre los actores regionales que debatieron acerca de los desafíos que enfrenta la región respecto a la descentralización y el bienestar de las personas.
Óscar Crisóstomo, gobernador de la Región de Ñuble, destacó que el Indicador de Bienestar Territorial Regional (IBT-R) implementado en el programa, es una herramienta que aporta con datos fidedignos “para la toma de decisiones apropiadas que mejoren la calidad de vida de las personas y de esta manera, lograr la felicidad de los habitantes”.
La instancia contó con las palabras de bienvenida de María Paz Troncoso, Subsecretaria de Desarrollo Regional y Administrativo, quien enfatizó la importancia de este programa para avanzar en la descentralización y el fortalecimiento de los gobiernos regionales.
Luis Valenzuela, director del CIT UAI y moderador del seminario, habló de las enseñanzas de Ñuble para Chile y de la forma cómo sus habitantes viven en su región. Explicó que el Indicador de Bienestar Territorial (IBT) se calcula sobre la base de cuatro dimensiones (accesibilidad, ambiental, socioeconómica y seguridad) que arrojan datos irrefutables acerca de la vida de las personas en los territorios que habitan, “siendo una herramienta flexible que permite trabajar con datos particulares de cada lugar, para mejorar la convivencia centrado en el bienestar humano territorial”.
Por su parte, Felipe Petit, jefe de División de Desarrollo Regional y Administrativo, Subdere, destacó que la plataforma “permite visualizar, en forma fácil, amigable y comprensible, el bienestar de las personas y permite simular el impacto de los potenciales proyectos de inversión en el territorio”.
Claudio Martínez, jefe de la División de Planificación y Desarrollo Regional de Ñuble, comentó la estrategia regional a través del IBT. Expuso sobre la importancia de retener el talento, “para lo que es necesario mejorar, entre otras cosas, la infraestructura y contar con los recursos necesarios para que estas personas desarrollen sus talentos en el territorio”. Planteó, asimismo, que para solucionar los desafíos regionales hay que tener información fidedigna y no basarse en percepciones, ya que estas llevan a tomar decisiones equivocadas.
En tanto Débora Farías, directora de la Secretaría Comunal de Planificación, se refirió al municipio de Chillán Viejo, que se proyecta como una Smart City: “Una ciudad inteligente antepone el bienestar de la comunidad sobre cualquier otro objetivo y para ello es necesario entender la ciudad”.
Francisco Gatica, profesor de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad del Biobío, expuso sobre la importancia que tiene para la descentralización contar con datos locales y oportunos, “teniendo como foco la gestión del conocimiento”.
Terminadas las ponencias, se realizó un panel de conversación en el que participaron distintos actores regionales, quienes reflexionaron respecto al proceso de implementación de la descentralización, el aporte del Indicador de Bienestar Territorial en la región de Ñuble y los desafíos pendientes, bajo una mirada local y acorde al enfoque de representatividad territorial regional. Luego respondieron consultas e inquietudes de los asistentes.
Parte de las actividades del encuentro contemplaron un taller en el que participaron funcionarios municipales de la región y del Gobierno Regional, realizando acciones prácticas mediante ejercicios basados en la evidencia territorial levantada y desarrollada durante el componente de medición en la región.
Al cierre del seminario, Luis Valenzuela agradeció a todos los ponentes y participantes del seminario por compartir sus experiencias y ratificó el compromiso del Centro de Inteligencia Territorial de la Universidad Adolfo Ibáñez en “devolverle la mano al país colaborando con estudios de manera que cada región se desarrolle íntegramente en beneficio de las personas”.