El profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez Wenseslao Unanue fue invitado a e exponer en el XXII Encuentro de Desarrollo Sostenible de Acción Empresas, donde tuvo un rol clave al entrevistar al economista, fundador y director del Centro de Desempeño Económico y Bienestar del London School of Economics, Sir Richard Layard.
Al inicio de la conversación el profesor Unanue le preguntó a Richard Layard su opinión respecto a la consideración del PIB como índice del progreso. “Pienso que el bienestar es la mejor medición, la más correcta, y el ingreso por su puesto es uno de los factores que lo afectan, pero es solo uno de los muchos factores”.
Actualmente, explicó el economista inglés, la distribución de la felicidad, primero, se explica por la distribución de enfermedades mentales y físicas y segundo, por las diferencias en las relaciones humanas de las personas: si tienen familia y si su vida familiar es buena, si tienen trabajo y si las relaciones laborales son buenas, si se sienten seguros y felices en sus comunidades, y solo después de esto se toma el ingreso como factor que explica las diferencias dentro de la comunidad.
“Tenemos que colocar el ingreso en su lugar cuando pensamos en qué es lo que hace una vida feliz, y creo que eso se aplica a los legisladores y también se aplica a los individuos cuando hacen sus elecciones”.
Cuando fue consultado por felicidad y bienestar, Layard dijo que él no veía ninguna diferencia entre ambos conceptos. Además, agregó que él cree que algunas personas se sienten incómodas al decir que la felicidad debería ser la medición del éxito en una sociedad. “Esas personas creen que quizás la felicidad no es importante, que es secundario o cualquier otra cosa y la verdad no es lo que hablan las personas. Si te pregunto ¿estás feliz en tu matrimonio? es una pregunta muy seria, o si te pregunto ¿tu hijo es feliz en el colegio? es una pregunta bastante central… y creo que son preguntas clave, pero que las personas se sienten un poco avergonzadas de responder”, concluyó.
Luego de la entrevista con el profesor Layard, Wenceslao Unanue profundizó en conversación con la periodista Macarena Pizarro algunos conceptos clave sobre felicidad, bienestar y países. Para el académico de la Escuela de Negocios de la UAI, el PIB está obsoleto como principal indicador del progreso. “El PIB no reconoce el impacto en el uso de los recursos naturales y su agotamiento; tampoco reconoce la economía subterránea ni mide los impactos en salud mental” explicó.
El profesor Unanue ha estudiado en su carrera la felicidad como un indicador que puede sustituir el clásico PIB para medir el progreso o desarrollo. “Por cierto, el desarrollo sostenible tiene mucho que ver con la aspiración a la felicidad que, asegura, ya se estudia como una ciencia.”
Sobre la felicidad y su relación con el trabajo, el profesor Unanue explicó que las personas más felices son más productivas en las empresas. “Pero hay que verlo como un concepto holístico de productividad. No es cuanto te pago y cuantas ruedas haces, productividad hoy es salud mental, engagement, compromiso y confianza en la organización. En definitiva, las personas más felices son más productivas holísticamente y se ha demostrado que las empresas que tienen en promedio mas trabajadores felices les va mejor en la última línea.”