La Global Alcohol Policy Conference es el principal foro que reúne a los responsables de la formulación de políticas sobre el control del consumo de alcohol y a investigadores de todo el mundo, y se desarrolló en octubre en Australia. El profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez, Guillermo Paraje, fue invitado a participar como Keynote speaker, por el trabajo que ha desarrollado en su carrera con respecto a la materia.
El estudio del profesor Paraje
En la oportunidad, el profesor Paraje presentó uno de sus estudios: Prices, taxes and early alcohol onset in Chile. “La evidencia internacional muestra que los impuestos tienen impacto sobre el consumo. A mayor impuesto baja el consumo, y eso se puede dar por tres razones…uno porque la gente que consume deja de consumir; lo segundo es que la gente que consume deja de consumir una parte, pasa de algo a menos y tercero, es que personas que habrían empezado a consumir, no empiezan,” explica el profesor. Esto es importante porque si pasa un período determinado de la vida – la adolescencia y la juventud- entonces después es raro la persona desarrolle una relación de consumo riesgosa con el alcohol. “No había evidencia sobre el efecto que tienen los impuestos en la decisión de empezar a consumir. Hice un estudio con datos de Chile y también de Argentina que básicamente muestra el efecto que tendrían en el consumo en esta primera fase,” explica Paraje.
La presentación tenía 2 partes: Ver el efecto que tendría una subida de precio sobre la decisión de empezar a consumir: “Lo que encontré para ambos países es que cuando suben los precios la gente o no comienza o retrasa su inicio. El momento del retraso del inicio en el caso del alcohol es muy importante porque el consumo de alcohol en edades tempranas tiene efectos fisiológicos fuertes, debido a que impide la formación óptima del cerebro.”
Lo segundo que mostró el profesor fue que “mientras más temprano comiencen a consumir, hay una mayor probabilidad que tu consumo futuro sea riesgoso: que te emborraches más veces o tengas un consumo dañino más frecuente. Lo que observo a través de encuestas a jóvenes (el profesor trabaja con 350 mil datos) es la cantidad de veces que niños en edad escolar se emborracharon el mes anterior y cuantas veces se emborracharon con más de 5 tragos la misma noche, porque eso ya es consumo riesgoso. Y se observa que las personas que reportan un mayor consumo riesgoso son aquellas que empezaron a tomar más temprano. Hay una correlación fuerte entre las dos variables.” Es decir, mientras más temprano se empiece a consumir, mayor probabilidad que en consumo sea riesgoso, y dado que los precios afectan el inicio del consumo de alcohol, “entonces se podría pensar que la política de aumentar los impuestos tendrá un efecto no sólo en la cantidad que se va a tomar, sino también en el patrón de consumo que se va a tener en el futuro.”
Chile al debe
Paraje señala que en relación a los impuestos, lo que importa es comparar el precio del bien con lo que ganan las personas. “Cuántos minutos tienes que trabajar para comprarte una cerveza o botella de pisco. En Chile, apunta el profesor, hay muy poca regulación de publicidad, de marketing. “Si bien hay una autorregulación por parte de las industrias, se cumple mal y poco. Lo que se ve en Chile y a nivel internacional también, es que además las mujeres están empezando a tomar más que antes, por varios factores, entre ellos el empoderamiento y también porque hay una estrategia de crearles bebidas atractivas.” Todo esto enferma a las personas y después, el sistema de salud se desgasta. “Este es un país que se enorgullece de ser productor de alcohol. Otros países también, pero tienen políticas para control de alcohol que acá no existen. Si las listas de espera para operarte un cáncer gástrico son enormes, entonces hay que preguntarse por qué hay tantos enfermos de cáncer gástrico y eso hay que multiplicarlo por todas las otras enfermedades asociadas al consumo, incluido los accidentes y violencia.”
Sobre GAPC 2017
La Global Alcohol Policy Conference que se desarrolló en Australia en octubre de este año, buscó ser un link entre la evidencia y la acción, usando rigurosas investigaciones sobre las políticas del consumo de alcohol para informar sobre efectivas medidas a nivel local, estatal y nacional. “La Conferencia fue bien variada, hay desde experiencias locales con grupos muy precisos con aborígenes australianos, políticas aplicadas a aborígenes australianos y en comunidades locales, políticas de tratamiento e intervención rápida y había muchas presentaciones sobre políticas de marketing, la influencia de la industria de alcoholes, porque hay evidencia cuestionable financiada por la industria para confundir el debate,” señala el profesor Paraje.