¿Cómo entender la petición de Evópoli y la UDI de aplazar la elección de gobernadores regionales? ¿Y la rápida respuesta de RN para no aplazarlas? Razones más, razones menos, el cuándo se votará por gobernadores no es trivial, sobre todo por el efecto que puede tener en la carrera presidencial de Chile Vamos.

Para entender mejor lo que está en juego con el aplazamiento o no de la elección, hay que considerar que la elección de gobernadores puede cambiar el peso relativo al interior de los partidos de la centroderecha. En particular, por la composición interna de los partidos y por el trabajo territorial históricamente desplegado, es plausible plantear que las posibilidades de Evópoli/UDI disminuirían, mientras que las de RN mejorarían, en vista a la nominación para la elección presidencial 2021. En caso de no aplazarse las elecciones de gobernadores, el próximo año a estas alturas deberían estar en plena marcha las campañas por las primarias regionales, en donde la identificación regional se espera que sea una de las variables claves del éxito electoral. En este sentido, recordemos que los únicos que apoyaron la elección directa de gobernadores fueron aquellos senadores RN de fuerte raigambre regional. Ningún senador Evópoli/UDI votó a favor, ni ninguno de sus dirigentes ha mostrado vocación por el proceso de descentralización. Es más, su vocación, tal como como lo han mostrado los últimos acontecimientos, está en la vereda opuesta: en bloquear el proceso.

Ahora bien, esta actitud obstruccionista de Evópoli y la UDI es consistente con un espíritu verticalista de esos partidos y, sobre todo, por la muy distinta configuración socio-cultural de sus bases (al compararse con RN). La configuración social del apelo de esos partidos es tan distinta, como las comunas del sector oriente de Santiago a las regiones. De hecho, el triunfo de Piñera en la segunda vuelta del 2017, se debió a la votación de grupos medios (C2/C3) de regiones, muchos de ellos siendo los primeros en sus familias en no votar por la DC o los partidos de izquierda. Esto sorprendió a muchos analistas y denotaciones como “fachos pobres” y otras igualmente desdeñosas aparecieron entre los intelectuales de izquierda.

Esta configuración social heterogénea al interior de Chile Vamos nos trivial en el contexto de una elección territorial y considerando que la nominación de los candidatos a gobernador se dará bajo primarias abiertas, en donde votarán todos aquellos que quieran hacerlo y no sean miembros de otros partidos, esto es, los independientes. RN aparte de apoyar consistentemente la causa regionalista, tiene en sus bases una composición socio-cultural más cercana a ese electorado regional, que votó probablemente por la derecha por primera vez en las elecciones pasadas.

Publicado en El Mercurio de Valparaíso.