Aproximarse al mundo de la exploración espacial es el propósito central del programa organizado por la HASSE (Houston Asociation for Space and Sciences Education), organización sin fines de lucro que se dedica a crear experiencias de aprendizaje positivas que no solo educan en el campo del espacio y la ciencia, sino que también permite a los jóvenes lograr un crecimiento personal más allá del aula.

A través de la Dirección de Relaciones Internacionales de la Universidad Adolfo Ibáñez, diecisiete alumnos de Santiago y Viña tuvieron la posibilidad de viajar a Estados Unidos para tener clases con expertos en áreas como la aerodinámica y arquitectura espacial.También los estudiantes UAI pudieron conocer cohetes de la NASA y de empresas privadas como SpaceX, Blue Origin de Amazon, Starliner de Boeing, Virgin Galactic.

Durante su estadía los alumnos visitaron el VIP del Johnson Space Center, los lugares de entrenamiento de astronautas en el ISS Mission Control Center, realizaron una simulación de una misión espacial en la Mission Control Center y conocieron el AD ASTRA Rocket Center donde se está desarrollando la nueva generación de cohetes de plasma. Además, conocieron la historia espacial de los programas Apollo y Soyus.

Al finalizar el curso los alumnos- que aprendieron a través del método STEM (sciences, technology, engineering and mathemathics)-, debieron entregar un proyecto sobre qué se necesita para llegar, establecerse y sobrevivir en Marte y la Luna. “Esta generación será conocida como la Generación Marte, ya que seremos testigos de la llegada del hombre a este planeta”, sostiene Francisco Ferrer, Coordinador General Intercambios de la UAI quien acompañó a los estudiantes durante el programa.

Para Ferrer, este programa tiene un nivel de expertos muy alto y aparte de enseñar las habilidades técnicas, “les abre la visión para que sueñen en grande, como lo hacen muchos de los astronautas actuales. Es un curso bien armado y muy motivante para cualquier alumno que le interesen los temas de las ciencias y el espacio”.

 Aquí los testimonios de algunos de los asistentes:

• Michele Sahurie (Ingeniería Comercial 4to año, Campus Viña): “el programa me pareció increíble, me ha gustado todo, lo he pasado demasiado bien, hemos estado llenos de actividades todos los días por lo que terminamos agotados, pero muy felices de aprovechar todo al máximo. Recomendaría el programa a ojos cerrados a las personas que están interesadas en el tema espacial”.
• Diego Fuentes (Ingeniería Civil Industrial 3er año, Campus Peñalolén): “este curso pone y aplica muy fuerte el trabajo en equipo y cómo exponer proyectos e ideas. Recomiendo el programa ya que no es 100% académico, es muy práctico y con muchas actividades turísticas y trabajo en equipo. Sin duda es una gran oportunidad”.
• Luis González (Ingeniería Civil Industrial 3er año, Campus Viña): “recomendaría el curso totalmente. Lo que más me gustó ir al Mission Control Center donde tuvimos que hacer una simulación muy real de un viaje espacial a la Luna y después a Marte. Es impresionante la cantidad de entrenamiento y conocimientos que se requieren y para un estudiante de Ingeniería se vuelve muy interesante y es un sueño estar acá”.
• Francisca Guerra (Ingeniería Civil Industrial 5to año, Campus Peñalolén): “el curso fue muy entretenido, tuvo muchas y diferentes actividades que siempre me impresionaron. Lo recomendaría 100%, es un programa alucinante y de calidad donde conocimos a muchas personas de muy alto nivel con las cuales trabajamos juntos. Todo fue muy interesante y desafiante”.
• Guillermo König (Ingeniería Civil Mecánica 3er año, Campus Peñalolén): “mi motivación principal era compartir y aprender de ingenieros del más alto nivel haciendo su trabajo, conocer la experiencia de los astronautas y saber cómo se aplica la ingeniería al nivel de la NASA. Recomendaría este curso especialmente a las personas que les gusta el espacio y la aplicación de la ciencia mecánica”.
• Fernando Perelló (Ingeniería Civil Industrial 5to año, Campus Peñalolén): “el programa me pareció muy entretenido e interesante, me encantó el tema de conocer lo que viene en nuevas tecnologías, a la vanguardia. Mi actividad favorita fue el diseño y construcción del Rover XPrice, donde pude desarrollar muy bien el trabajo en equipo y hacer nuestra presentación de buena forma. El curso es muy bueno y lo recomendaría, se conoce mucho de forma que nunca lo podrías hacer de turista”.