31 estudiantes de Austria, Bolivia, China, Francia, Alemania, España y Chile ya son parte de una nueva generación de CEMS UAI.

El modelo educativo de la Universidad Adolfo Ibáñez está basado en tres pilares: El programa de Artes Liberales, la formación en competencias profesionales y la especialización en el último año de la carrera. (A partir de este 2021, con el lanzamiento del modelo 3+2 en la malla de Ingeniería Comercial, esta especialización se dará en los dos últimos años de la carrera y la licenciatura se obtendrá en 3 años). Para especializarse, los alumnos de comercial pueden elegir entre 13 magísteres, uno de ellos, CEMS UAI, Master in International Management.

Desde el año 2013, la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez pertenece CEMS Global Alliance, una asociación, que incluye a 33 universidades y más de 70 empresas alrededor del mundo, y que busca educar a la siguiente generación de líderes de empresas globales que las compañías necesitan.

CEMS se caracteriza por su multiculturalidad, exigencia, alta calidad académica de sus estudiantes, la directa conexión que el programa tiene con sus Corporate Partners, y una intensa colaboración y crecimiento conjunto entre las escuelas de negocios que integran la red. “Lo interesante de este programa es que te entrega herramientas que van mucho más allá de una excelente formación académica. Ser parte de la comunidad CEMS es una experiencia internacional única donde el alumno aprenderá, tanto en forma teórica como práctica, a desenvolverse tanto en empresas multinacionales como empresas locales que se encuentran en otros países”, explica el director académico de CEMS UAI, Santiago Mingo.

Los estudiantes de CEMS cumplen un período académico en su universidad de origen y el siguiente período, en otra universidad de la alianza CEMS. Su práctica profesional también la deben cursar en un lugar distinto a su país de origen. “Este un programa muy flexible donde los alumnos tienen la oportunidad de tomar electivos a partir de una amplia oferta de cursos que ofrece tanto la UAI como las otras escuelas de la red. Esto permite que el alumno pueda adaptar el programa a sus propios intereses y planes de carrera. También está la posibilidad de involucrarse en una serie de actividades con las organizaciones y empresas partners, como seminarios, talleres, prácticas, y business projects. A su vez, los graduados del programa entran a una extensa red de exalumnos mundial que se mantiene muy activa,” agrega Santiago Mingo.

Este 2021, debido a la crisis sanitaria, las clases comenzaron en formato híbrido. Es decir, los alumnos locales en sala mientras que los estudiantes extranjeros se sumaron vía online. Se incorporarán a la presencialidad una vez que las fronteras del país sean abiertas para extranjeros no residentes en Chile.

Todos los estudiantes fueron recibidos por Santiago Mingo, y por la Vicedecana de Desarrollo Académico y Gestión, Ana María Bravo.

Perspectiva global

Verónica Torrejón no solo es alumna del programa sino también la Presidenta de CEMS CLUB, organización formada por los propios estudiantes que se encarga de varios aspectos durante el trimestre, entre ellos, de la creación y promoción de charlas y eventos profesionales. Cuenta que de los 13 magísteres de especialidad que ofrece la UAI a sus estudiantes de Ingeniería Comercial, optó por CEMS porque le da muchas alternativas para trabajar y potenciar su futuro, tanto en compañías nacionales como internacionales. “Además, potencia los valores que me han definido como persona: conocer otras culturas, sostenibilidad, diversidad, una mirada al mundo distinta, con mucha responsabilidad por el entorno y empatía. El programa une los negocios –que es lo que hemos estado aprendiendo hasta ahora-  con una mirada muy empática e integradora.”

Este lunes 13, las clases comenzaron con el seminario dictado por el profesor Ignacio Martín, “Block Seminar” y Verónica agrega que la experiencia ha sido increíble. “Estoy gratamente sorprendida, me ha encantado como ha ido desarrollando la clase y los temas, porque ha hecho que nosotros lo veamos desde nuestra experiencia y vayamos aprendiendo, llegando a conclusiones que antes no habríamos pensado.”

¿Una vez egresada? De aquí al corto plazo, a Verónica le encantaría estar desarrollándose en una organización o empresa internacional o multinacional, “que siga la misma línea de los valores del CEMS, donde se miren los problemas de la sociedad, los objetivos de desarrollo sostenible y se empiece a trabajar en soluciones para poder tener una sociedad mejor.”

Daniel Goffman, también estudiante del programa, cuenta que en su caso eligió CEMS porque le ofrecía una perspectiva global. “Uno está en contacto con otras culturas, con estudiantes de otros países y eso te abre muchas posibilidades para el futuro. Me gustaría poder generar un impacto en el mundo, ya sea a través de la industria farmacéutica, biotecnología o financiera, pero dejando una marca, algo que es muy importante para nuestra generación. CEMS ayuda a dejar de lado los prejuicios que uno pudo haber tenido de chico, perspectivas que van a ser muy importantes para el futuro, los contactos para el mundo personal y profesional.”

Mercedes Pino, por su parte, dice que quiso integrarse a CEMS porque “es una oportunidad única.” Amante de la moda, le encantaría poder trabajar en el futuro en alguna empresa de la industria internacional y poder aportar con ideas innovadoras. “Poder compartir con personas de otros países nos da la posibilidad de crecer tanto profesional como personalmente”, cierra.

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