Reducir el consumo energético del uso de aire acondicionado hasta en un 40% tiene como objetivo un estudio desarrollado por el académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias UAI, Francisco Ramírez, quien busca aprovechar las bondades de materiales especiales que permiten disipar la radiación térmica.

Este tipo de componentes, conocidos por sus siglas PRC en inglés, son capaces de enfriarse por sí mismos, reduciendo al menos 10°C por debajo de la temperatura ambiente, incluso bajo exposición directa al sol. Generalmente, se basan en polímeros inorgánicos y existen en diversos formatos, como telas, películas y pinturas. Asimismo, su fabricación es simple, de bajo costo y existen también en formato comercial.

Según indica el académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias, Doctor en Ingeniería Mecánica por la Universidad Carnegie Mellon, “el efecto PRC depende de las condiciones climáticas y, en este sentido, Chile tiene condiciones ideales que no se han estudiado. Estudié y fabriqué estos materiales durante mi investigación postdoctoral en University College London, y creo que el potencial que tiene esta tecnología en Chile es enorme”.

Para estudiar el impacto de los materiales PRC -proyecto que se ejecutará gracias al Programa de Apoyo a la Investigación de la Dirección de Investigación de la UAI (en su formato “Investigación Individual”), se realizará un trabajo conjunto con María Jesús Schlotterbeck, Agustín Soto y Nicomedes Morón, estudiantes de pregrado de Ingeniería Civil Mecánica, para elaborar una herramienta computacional para medir el desempeño de los componentes expuestos al ambiente, posteriormente montar un sistema experimental y finalmente medir el poder de enfriamiento de los materiales y determinar las posibilidades de su uso en el país.

Para finalizar, el profesor Francisco Ramírez agrega que “los resultados de este estudio nos permitirán tener el primer catastro sobre el potencial del enfriamiento radiativo en Chile. Estamos trabajando con muestras de la compañía 3M, quienes también están muy interesados en estos resultados. Nuestro objetivo es generar una herramienta computacional, validada mediante mediciones en terreno, que nos permitirá modelar el ahorro en consumo eléctrico por el uso de esta tecnología en distintas regiones del país. Creemos que el mayor impacto puede ser en la industria minera, donde existen muchos sistemas que requieren enfriamiento durante todo el año”, concluye.