Contar con un mejor entendimiento sobre estrategia financiera fue lo que llevó a Luis Correa, Ingeniero Civil Estructural, MBA y Diplomado en Dirección Financiera (2019), perteneciente a nuestra Escuela de Negocios, a matricularse en este programa. “Fue una decisión netamente personal, ya que sentía que existían ‘lagunas’ de conocimiento en temas financieros y legales que en el día a día no estaba llenando, y que lograrlo me ayudarían a potenciar, además, mi empresa”, afirma el profesional.

Elegir la universidad no fue tema para el ex alumno, puesto que como había realizado un MBA, conocía su prestigio y calidad. “Además, me gustó la forma de abordar los temas; no era teórico”, asegura.

Lo mismo cuenta que sucedió con el diplomado, “estaba muy adaptado a la realidad y con ejemplos actuales, lo cual lo hacía mucho más interesante. De hecho, justo coincidió con el estallido social y la caída de la bolsa, impactando directamente en renta fija y variable. Y todos esos impactos los pudimos observar en vivo y analizar en clases, de la mano de los profesores”, explica.

Entre los aspectos que destaca Luis, se encuentran los trabajos grupales, ya que según dice, “habíamos profesionales de diferentes disciplinas y rubros, por lo que cada uno iba aportando con su visión. De esta forma íbamos aprendiendo mucho más”.

Sobre el plantel docente, el ingeniero civil comenta que “son profesores con mucha experiencia, que han trabajado en la bolsa y en muchas otras áreas, por lo que sus clases son muy prácticas”.

Valiosas herramientas para la vida

En relación a los ramos, el ex alumno cuenta que el de intermediación y renta fija fueron los que más le gustaron, puesto que entregaban herramientas de fácil aplicabilidad para evaluar dichos instrumentos. “Trabajamos bastante en esas clases, hicimos muchos ejercicios y guías, logrando fijar el conocimiento”, asegura.

Es por ello que hoy dice que maneja estos elementos fundamentales en administración financiera, “adquirí la capacidad de efectuar análisis mediante herramientas cuantitativas y, de alguna manera, me convertí en un asesor integral para ayudar a cercanos en temas de inversiones”, asevera.

Sobre este tema, el profesional agrega: “trabajo en proyectos industriales y estos tienen un presupuesto, así como ciertos riesgos financieros que hay que visibilizar, darle un tamaño, en definitiva, un número. Y el diplomado me entregó las herramientas necesarias para llevar a cabo estos procesos”.

Por todo esto es que Luis decidió, en 2020, continuar profesionalizando sus conocimientos mediante el Magíster en Dirección Financiera. “Indudablemente que ambos programas fueron claves para asumir mi cargo actual”, afirma.