Profesionalizar ciertas habilidades de política y comunicación, fue el principal motivo que llevó a Alejandro Álvarez, abogado y magíster en Comunicación Política y Asuntos Públicos de la UAI, a cursar este programa de estudios. “Trabajo hace mucho tiempo en política y siento que hay temas que se deben ir reforzando con el tiempo. Pero, no solo en materia de gestión, sino que también en comunicaciones, relacionamiento con personas y otros asuntos. Además, los desafíos en el mundo público son transversales, por lo que un día puedes estar hablando de energía, mientras que otro de obras públicas. Y para ello hay que estar preparado”, explica.

Si bien cuenta que analizó programas de otras universidades, se decidió finalmente por el de la UAI, pues ofrecía un enfoque más práctico, en línea con lo que estaba buscando.

“Otro factor que gatilló mi decisión fue que soy egresado de derecho de esta universidad, por lo que conozco su prestigio y excelencia académica. En ese sentido, me daba total confianza y sabía que me iría a la segura”, enfatiza.

Dado que es de Rancagua, y en ese tiempo trabajaba como representante del ministerio de Hacienda en la Región de O´Higgins, dice que combinar viaje, estudio y trabajo, fue un gran sacrificio. Sin embargo, asegura que “valió totalmente la pena”.

Herramientas prácticas

Un aspecto que destaca Alejandro es la calidad de los profesores ya que “tienen esa riqueza transversal del mundo público, privado y académico, lo cual es muy interesante. Además, están siempre muy disponibles a resolver dudas y a orientarte con las materias”.

En relación a sus compañeros de generación, cuenta que “todos son profesionales que toman decisiones en sus respectivos cargos, lo cual brinda una mirada distinta en cuanto a la gestión, porque la mayoría ha tenido procesos complejos en materia de comunicación, y pueden compartir su experiencia”

Asimismo, resalta la malla curricular, la cual califica de multidisciplinaria y ejecutiva. “Me gustó mucho porque va directo ‘al grano’ en cómo aplicar diferentes procesos en las comunicaciones, lo cual es muy relevante para prestar asesorías o entender cómo se maneja este mundo. En este contexto, te entrega herramientas que puedes aplicar de manera fácil y con una mayor intensidad en tu trabajo”, asegura.

Alejandro destaca que el magíster le ha servido mucho para desempeñar de mejor forma su actual cargo de vocero de Gobierno en la Región de O’higgins, ya que ha podido entender el mundo de las comunicaciones desde la lógica mediática, lo cual es clave en su trabajo. También le ha permitido comprender el proceso político de forma profesional y, sobre todo, el importante rol que juegan las comunicaciones en la esfera pública. “Los que nos dedicamos al mundo público tenemos que tener presente que, al momento de comunicar una política, hay un proceso detrás que implica una manifestación de poder, así como negociaciones y sensibilidades que hay que tener en cuenta”, explica el abogado.

Populismo penal en los medios

Como proyecto de título, el profesional llevó a cabo una tesis sobre populismo penal en los medios de comunicación. Un fenómeno que según comenta está muy presente, por ejemplo, cuándo se exacerba el rol de la víctima y se dan a conocer los delitos o se habla de la dureza de las penas.

“A pesar de que me tocó elaborarla en pleno estallido social y, por tanto, el proceso fue más demoroso, quedé muy conforme y obtuve muy buenos resultados. Aprendí aspectos teóricos del magíster, como teoría de la comunicación, y ratifiqué que me gusta mucho el lado de la investigación académica”, aclara el exalumno.