Como una instancia de conversación para debatir temas relacionados con la contingencia que vive el país, la Facultad de Artes Liberales (FAL) realizó la charla ¿Un nuevo pacto social? Ciencia / Historia / Filosofía, instancia en la que expusieron tres académicos de la facultad, Alejandra Montecinos Doctora en Ciencias, mención Física, Universidad de Chile. Directora Académica del Diplomado Cruzando las Fronteras de la Ciencia: desde el Big Bang a la Inteligencia Artificial; Gonzalo Serrano Doctor en Historia, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Director Centro de Estudios Americanos UAI. Director Académico del Diplomado Chile, 500 años de Historia; y Diego Rossello Doctor en Ciencia Política, Universidad de Northwestern, Estados Unidos. Director Académico del Diplomado Lectura Crítica.

En el encuentro los tres académicos, desde su área de expertiz enfrentaron la pregunta por un nuevo pacto social. Gonzalo Serrano, encargado de la primera exposición destacó la relevancia de la historia para entender procesos y fenómenos, a su juicio en términos de la historia “el presente puede ayudar a comprender los hechos del pasado, que en muchas ocasiones son antecedentes de lo que está sucediendo”. Serrano expuso lo que a su juicio son las causas del 18 de octubre en la historia. Para él los antecedentes más próximos tienen relación con las movilizaciones en el Instituto Nacional, Antorcha, el caso Catrillanca, las declaraciones de los ministros y el alza del pasaje en 30 pesos. Pero estos antecedentes no se explican sin recordar otros anteriores como la crisis en la Araucanía, las marchas estudiante y de No + AFP e incluso más atrás con la Constitución de 1980 y el 11 de septiembre.

En tanto, Diego Rossello, explicó el pacto social desde la perspectiva hobbesiana. A su juicio la idea de pacto social está en todos lados y la preocupación por éste atraviesa a todas las personas. Planteó que desde la teoría de Thomas Hobbes el Estado surge mediante un pacto o contrato social artificial frente a un Estado de naturaleza que irrumpe, sin embargo, se detiene a explicar que pacto social no es sinónimo de Constitución, pero que en Latinoamérica se ha traducido así. Para el académico el pacto social incluye, representa, contiene y vela por el orden frente al caos: “las manifestaciones masivas muestran una cierta voluntad popular en relación a un cambio que no es solamente un cambio de políticas, sino que es un cambio que le podemos llamar de modelo o pacto social. De todas maneras, habría muchas formas de generar un nuevo pacto social, pero por algún conjunto de razones que se me escapan, la Constitución ha canalizado, para bien o para mal, todas las expectativas o la mayoría de las expectativas de esta crisis. Esto es bueno por un lado porque abre una ventana de innovación, que puede ser muy prometedora, pero por otro lado, puede traer mucha frustración si la gente ve que un cambio de Constitución no resuelve los problemas, que es posible que ocurra. Hay que estar atento a eso”.

 Por su parte, Alejandra Montecinos expuso desde el aporte que puede hacer la mirada científica a un nuevo pacto social. Planteó que existen tres puntos de relevancia: 1) Cuál podría ser el papel de la ciencia en la sociedad; 2) cómo ha sido la evolución del contrato social en relación con la ciencia y 3) los posibles aportes desde la ciencia a la construcción de un nuevo pacto social en Chile. A juicio de la académica “existe una relación entre ciencia y sociedad que es directa y por eso es importante que la ciencia sea un aporte al nuevo contrato social”.

La instancia también permitió dar a conocer tres diplomados de la Facultad de Artes Liberales que a juicio de los académicos contribuyen a la formación al entregar herramientas que permiten entender mejor la realidad y entendernos a nosotros mismos:  el Diplomado Cruzando las Fronteras de la Ciencia: desde el Big Bang a la Inteligencia Artificial, el Diplomado Chile, 500 años de Historia y el Diplomado Lectura Crítica.

En este escenario, Rossello sostiene que “en tiempos de crisis la gente está en búsqueda de sentido y las artes liberales no te van a entregar una receta, ni una respuesta a la falta de sentido, pero ayuda, en el mejor de los casos, a negociar el sin sentido y te dan mejores herramientas para evitar el sin sentido. Creo que la apuesta de la UAI a las artes liberales es coherente y los diplomados son una expresión más de eso y todo indica que la gente lo requiere y lo necesita”.