El camino de formación profesional que eligió Daniela Montes de Oca, ingeniera comercial de la Universidad Adolfo Ibáñez, fue atípico. Los estudiantes de la carrera deben optar por profundizar su licenciatura con una mención o en administración de empresas o en economía,  y ella optó por la primera. Sin embargo, “luego me enamoré de la economía y quise tomar esa mención también. Finalmente opté por las dos ya que ambas entregan herramientas diferentes que son útiles para un ingeniero comercial.”

El modelo educativo de la Universidad Adolfo Ibáñez está basado en tres pilares: El programa de Artes Liberales, la formación en competencias profesionales y la especialización en el último tramo de la carrera. (A partir de este 2021, con el lanzamiento del modelo 3+2 en la malla de Ingeniería Comercial, esta especialización se dará en los dos últimos años de la carrera). Para especializarse, los alumnos de comercial pueden elegir entre 13 magísteres.

En el caso de Daniela, el 2018 terminó las dos licenciaturas y en el 2019 decidió cursar el Magíster en Economía. Hoy, trabaja en investigación, como economista junior, en el INTA (Instituto de Nutrición y Tecnología Alimentaria de la Universidad de Chile) . “Todo lo que aplico lo aprendí en la universidad. A pensar y a leer de manera crítica, a escribir mejor, el lenguaje de la econometría y el uso de bases de datos, todas habilidades que uso día a día.”

Licenciatura en Administración de Empresas y Licenciatura en Economía

Daniela, que experimentó el paso por las dos licenciaturas, cuenta con mucha propiedad de sus diferencias. “Administración de empresas está más orientado al trabajo en equipo y a la resolución de problemas de la empresa. Al estudiarlo, se siente un poco más práctico que economía. Por otra parte, economía tiene una fuerte base teórica, se enfoca en problemas que van más allá de la empresa (sin dejarlos atrás) que apuntan hasta políticas públicas y te preparan para desarrollarte tanto en la academia como en la empresa o en lo público.”

Asegura que al cursar ambas, ganó distintas habilidades: “Al cursar administración de empresas, gané muchas horas de trabajo en equipo, conocimientos de marketing y de gestión de operaciones; mientras que en economía gané conocimientos en mayor profundidad de los distintos tópicos que trata la economía, conocimientos de historia y herramientas matemáticas fundamentales para un economista. Además, gané experiencia como ayudante de cátedra y de investigación, las que fueron oportunidades para probar como se siente estar en frente de una clase y trabajar en proyectos de investigación.”

Licenciatura en 3 años

Pablo Castañeda, vicedecano de Ingeniería Comercial de la Universidad Adolfo Ibáñez, explica que desde este 2021, las licenciaturas están más comprimidas: en vez de tener una duración de 4 años, se cursan en 3.  “Adicionalmente, tienen algunos elementos en común, lo que hace más factible obtener las dos licenciaturas cursando un semestre adicional”. Ese semestre, explica el vicedecano, puede incluso cursarse después de haber obtenido el magíster de especialidad, es decir, se puede cursar la segunda licenciatura después de haber obtenido el título profesional.

“Cada licenciatura tiene focos distintos. La de economía profundiza en herramientas analíticas,  mientras que la licenciatura en administración de empresas dota con capacidades para gestionar recursos físicos y humanos y eso es algo muy importante hoy en las empresas.”

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