11 de diciembre de 2019
Cada año la Asociación Chilena de Estrés Traumático junto a la Universidad Adolfo Ibáñez organizan la Jornada Internacional de Trauma Psíquico, que tiene como objetivo reunir a profesionales de distintas áreas para abordar temas en torno al trauma. Este año la UAI fue sede y el tema central fue trauma psicosocial y su impacto transgeneracional, permitiendo a los expositores, establecer un vínculo y reflexión respecto al estallido social en Chile.
Participaron más de 40 expositores, entre ellos Bita Gafhoori, profesora de asesoría psicológica de la Universidad Long Beach y Fundadora y Directora del Centro de Recuperación de Trauma de la misma universidad, quien habló sobre la equidad en salud mental, los servicios existentes y la diseminación de tratamientos en trauma basados en evidencia de grupos culturalmente diversos.
En la jornada, que se extendió por dos días, asistieron más de 170 profesionales, quienes pudieron conversar y reflexionar en las diversas mesas de diálogo. Ruth Weinstein, académica de la Escuela de Psicología fue parte del comité organizador y señala que “la relevancia de esta instancia es muy importante, ya que necesitamos poder pensar, reflexionar, aprender y compartir colectivamente acerca de lo que está sucediendo en nuestro país”.
Con el objetivo de atender a la contingencia, en la antesala a la jornada se realizó un espacio abierto de conversación entre profesionales de distintas áreas vinculadas a la salud mental, en la que se reflexionó sobre la violencia y las repercusiones que tuvo en las personas el estallido social. Se compartieron experiencias y estrategias para el apoyo de personas y comunidades afectadas.
Durante la jornada, se abordaron temas de primeros auxilios psicológicos e intervención en crisis en distintos contextos: trauma, abuso, violencia, pacientes en psicoterapia, como distintas poblaciones afectadas, tales como personas que revivieron lo sucedido el 73, personas que se han estado manifestando, mapuches, personas LGBTI+, trabajos en colegios en donde hubo suicidio juvenil, entre otros. Para Ruth estas actividades “aportan a la disciplina, ya que se tocan temas transversales a varias profesiones, y que está presente en muchas situaciones y que recién ahora se le está dando la importancia suficiente. Se sabe poco, por lo que las ponencias fueron de mucho aprendizaje”, acota.
Al ser una instancia multidisciplinaria, varias de las mesas integraron el trabajo de abogados con el de psicólogos y psiquiatras, permitiendo así compartir nuevas técnicas y herramientas para trabajar el trauma en diversos ámbitos.