El proceso de digitalización de la vida de los niños, niñas y adolescentes (NNA) se ha acelerado por la crisis covid-19. Hoy, la pantalla es la manera para ir a clases y para sociabilizar con los amigos y familiares. Para analizar esta temática, el Programa Ciudadanía Digital de la Escuela de Comunicaciones y Periodismo realizó el conversatorio: “Aceleración de la vida digital de niños, niñas y adolescentes”, donde estuvieron como expositores el director académico del programa y académico UAI, Luis E. Santana (Psicólogo, MPA, PhD.),  junto a Matías Dodel, investigador y docente de los Departamentos de Ciencias Sociales y Políticas y de Comunicación de la Universidad Católica del Uruguay (Psicólogo, Ma. Sociología y PhD.) y  Patricia Muñoz Defensora de  los Derechos de la niñez (Abogada).

 ¿Cómo debe enfrentar la sociedad el desafío de esta vida digital de NNA? ¿Las políticas y derechos asociados a estas temáticas consideran las necesidades de NNA?  Luis E. Santana, psicólogo y PhD en Comunicación, explicó que “aun cuando sabíamos que no teníamos resueltas todas las prácticas y normas adecuadas para interactuar en internet, hoy la pantalla es la manera como NNA asisten a clases, socializan con los amigos y familiares y cómo se desarrollan y testean su identidad”.  El contexto actual, indica el académico UAI,  aceleró los desafíos que tenemos como sociedad en cuanto a la participación ciudadana y democracia, la desinformación y cómo podemos acompañar a NNA de manera saludable en este ambiente.

Por su parte  Dr. Matías Dodel planteó que las políticas públicas y de salud que se hacen cargo de los niños y lo digital, “deben estar basadas en evidencia y no en los miedos exagerados y amplificados por los adultos, algo a lo que se llama “pánicos morales”. Agregó que hay mitos que resultaron no ser ciertos,  “no hay evidencia de que La Ballena Azul, haya ocurrido, es una Fake News”, tampoco hay evidencia “de niños chilenos o uruguayos usando pañales para no dejar de jugar videojuegos” y desmiente el mito de que el tiempo en pantalla fuera similar a consumir cocaína, ya que estudios muy rigurosos han descubierto que si bien hay una correlación negativa con el bienestar de adolescentes, “esta es muy menor si se le compara a otras situaciones tan comunes como usar anteojos “.

“Los adultos tienden a creer que los niños y jóvenes tienen mucha más información sobre la tecnología, pero en realidad los adultos saben mucho más que ellos sobre cómo tomar decisiones en el ambiente digital, por tanto deben involucrarse”, concluyó Dodel.

Por su parte, la Defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, destacó que el contexto de la crisis sanitaria actual “ha dejado de manifiesto una importante brecha en el acceso a internet por parte de NNA chilenos, demostrado enormes diferencias según quintiles de ingreso (…) lo que ha visto afectado el derecho a la educación de un grupo de NNA”. El covid ha aumentado el contacto de NNA con la tecnología para realizar sus acciones cotidianas, lo cual a su parecer debe acompañarse de una “autonomía progresiva, tratando a NNA como sujetos de derecho, más que meros sujetos de protección”, ya que claramente la capacidad de decisión y discernimiento de niños de 4 años es distinta de la de los de 16.  Para Muñoz, “la protección es distinta de la fiscalización, o de la persecución (…) el espacio digital ofrece oportunidades para NNA, pero también riesgos, por lo que es relevante alfabetizar a padres y educadores, para que acompañen a niños y adolescentes en este proceso de relación con la tecnología”, enfatizó.

La relación de NNA con la tecnología es innegable, de hecho la Defensora de la Niñez presentó los resultados del Estudio de Opinión conducido por la Defensoría de la Niñez que consultó a niños, niñas y adolescentes chilenos, que arrojó que mayoría de los NNA se informa sobre la actualidad y contingencia nacional a través de redes sociales (77,6%), seguido por la televisión (58,2%). “Además un 76% considera que los medios de comunicación respetan poco o nada a niños, niñas y adolescentes” agregó Muñoz.

A partir de este conversatorio, el programa Formación de Ciudadanía Digital, recoge las siguientes conclusiones:

• NNA son sujetos de derecho y deben ser tratados como tal, y deben participar en la definición de las políticas sobre lo que les concierne en lo digital.
• No al pánico moral, basemos las políticas públicas en evidencia.
• La brecha y vulnerabilidad en el mundo digital no viene de la experiencia digital, sino que es anterior. Está en la inequidad del mundo físico y las condiciones de vida de NNA y sus familias.
• Padres y cuidadores deben involucrarse en la mediación del uso de las tecnologías digitales.