Con la llegada de la pandemia los emprendedores (as) tuvieron que enfrentarse a otra realidad: limitaciones en el contacto con sus clientes, aprender a utilizar otras plataformas digitales y adaptarse a nuevas formas de venta, entrega y promoción. En ese contexto, el empaque y la presentación se convirtió en una herramienta fundamental para resaltar los productos en un entorno cada vez más competitivo.

En este contexto y con el objetivo de aportar al desarrollo de emprendimientos en Viña del Mar, el Fab Lab, laboratorio de fabricación de la Escuela de Diseño de la UAI, en conjunto con la Dirección de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Viña del Mar, desarrollaron un Taller de Packaging. La iniciativa estuvo enfocada en un grupo de emprendedores (as) quienes, gracias a los programas de diseño digital y a las máquinas con las que cuenta la universidad, tuvieron la posibilidad de diseñar y fabricar empaques que respondieran a las necesidades de los productos que comercializan.

“Como Fab Lab nos sentimos responsables del entorno que nos rodea. Por lo mismo, a través de diversas instancias, buscamos conectarnos y trabajar con las comunidades más cercanas, ya sea a través de la transferencia de conocimientos o  llevando a cabo diferentes proyectos concretos que permitan acercar a las personas al mundo de la tecnología y, de esa manera, generar un impacto positivo en sus vidas”, señaló Suilim Milla, lab manager del Fab Lab del campus UAI  de Viña del Mar.

En cinco sesiones teórico-prácticas “los participantes aprendieron sobre la importancia de la identidad de sus emprendimientos y el posicionamiento de sus marcas en el mercado”, dijo Milla quien además destacó que teniendo en cuenta sus requerimientos, el tipo de producto que comercializan y la forma de envío -entre otras particularidades- podrán desarrollar un packaging adecuado, sofisticado y que los diferencie.

Los participantes asistieron a tres  jornadas de diseño realizadas en modalidad online y dos presenciales en las que trabajaron en el proceso de prototipado y fabricación del empaque junto a profesionales del laboratorio que los guiaron en el proceso, así como en el uso de las máquinas. Además del empaque de cartón cortado a láser, cada uno pudo llevarse su propio diseño de “packaging con identidad” para poder adaptarlo y replicarlo en las presentaciones de sus productos y avanzar un paso más allá en su negocio.

“Estoy feliz con el diseño logrado y la asesoría que me han dado en este taller. Yo hago joyas con meteoritos y logramos un diseño increíble que se puede reflejar en los que se basa mi marca: la noche, la luna, el cielo y la naturaleza. Para mí era muy importante proteger esta pieza de la humedad, por lo que el diseño era fundamental”, comentó Carolina Andrade, dueña de joyas Bosque de Luna y alumna del taller.