Estudiantes de tercer, cuarto y quinto año de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI) del campus Viña del Mar, participaron de la primera versión del curso de Ingeniería Humanitaria, dictado por la FIC, con la colaboración de la Fundación Ingeniería Sin Fronteras Chile (ISF Chile).

Un total de 16 estudiantes realizaron proyectos en las comunidades de Los Perales, Cerro Merced, Pompeya Sur y Ángel Parra, en la región de Valparaíso, y resolvieron problemáticas sociales en estas, tales como seguridad vial, acceso al agua e inundaciones.

De acuerdo con el área de Responsabilidad Social de Ingeniería UAI y la fundación Ingeniería Sin Fronteras, el fin de impartir este curso se enfoca en incorporar el rol social en la formación de los futuros ingenieros e ingenieras.

“El objetivo del curso es desarrollar herramientas para la gestión de proyectos de Ingeniería en las y los estudiantes, con un enfoque humanitario y sistémico, a través de una experiencia de inserción profesional con comunidades en contextos vulnerables de la Región de Valparaíso”, explicó Santiago Mallagray, director ejecutivo de Ingeniería Sin Fronteras Chile.

Desde la exploración de desafíos con comunidades, hasta las cátedras y talleres en módulos de clases, el curso buscó amplificar la visión disciplinar de las y los estudiantes con una visión interdisciplinaria y práctica de la Ingeniería.

En esta asignatura se entregaron herramientas de gestión y ejecución de proyectos y se aproximó a los y las estudiantes a una experiencia de trabajo real, desarrollando, a su vez, capacidades de liderazgo, proactividad y habilidades transversales para su devenir profesional.

Las temáticas abordadas durante el curso se dividieron en seis módulos: Introducción a la Ingeniería Humanitaria; Ingeniería y ODS Ética humanitaria y comunitaria; Diagnóstico comunitario; Diseño participativo: planificación proyecto Ingeniería Humanitaria; Implementación participativa: trabajo y cuidado de equipos; y Evaluación de proyectos de Ingeniería Humanitaria.

“Como Facultad de Ingeniería y Ciencias, reforzamos nuestro compromiso de formar ingenieras e ingenieros de excelencia, conectados y comprometidos con la realidad social, desde lo local a lo global, y con la misión de construir un mundo sostenible. Buscamos que nuestros egresados y egresadas tengan un sello distintivo en su formación profesional para aportar al desarrollo de la sociedad, conectando con las comunidades y realidades de nuestro país”, aseguró Renato Cabrera, vicedecano de la Facultad de Ingeniería y Ciencias UAI, campus Viña del Mar.

Experiencia

Vicente Cárcamo, uno de los estudiantes que tomó el curso afirmó que “tener una mirada más crítica y profunda en cuanto lo social en proyectos de los que seamos partícipes, independiente de si son directamente sociales o privados, será un aporte que estoy seguro hará diferencia”. El alumno puntualizó que “introducirse a esta experiencia con el apoyo de variados profesores, creo que abre una puerta que nos brindará una mirada social en cada problemática y proyecto que enfrentemos. El saber que hay múltiples investigaciones y material de estudio detrás de los temas vistos, permite evidenciar la importancia e impacto que estos mismos tienen si se practican e implementan”. 

Por su parte, Ignacia Bächler aseguró que “el curso superó todas mis expectativas y me generó muchas más sobre lo que mi futuro como profesional puede llegar a ser, ya que pude ver un lado de la Ingeniería que no conocía, conocer todo lo que las ciencias sociales tienen para enriquecer nuestra formación como ingenieras y poder generar y aportar a lo que realmente importa, las personas”.

La estudiante agregó que “creo que el curso logra un balance perfecto en cuanto a lo que nosotros podemos aportar como lo que los demás tienen para entregarnos. En el desarrollo del curso y del proyecto, junto a mi equipo, pudimos darnos cuenta de lo importante que es conocer e involucrarse con las personas con quienes trabajamos, ya que al fin y al cabo estamos trabajando con y para ellos”.

En tanto, Francisca Labbé explicó que “desde que estoy en el colegio me ha interesado mucho poder involucrarme en distintas realidades de mi país y entré a Ingeniería con las ganas de poder seguir aportando en el área social, y este ramo me dio el espacio de adquirir herramientas fundamentales para poder implementarlas en mi futuro laboral”.

La estudiante aseguró que “fue un curso súper personalizado, en el que el trabajo en equipo fue fundamental. Además, cuando se trabaja con personas, hay un compromiso distinto y más profundo, que nos movilizó a hacer el proyecto de la mejor manera posible”.

Finalmente, Sebastián Chávez comentó que “el poder ver el impacto que mi proyecto tendría de manera directa sobre una comunidad, me permitió trabajar bajo una perspectiva completamente distinta. Cada paso, cada decisión traía un enorme peso consigo. El poder experimentar esta sensación de primera mano fue un aporte inmenso para mi formación académica, y me encuentro completamente agradecido por ello”.