Con una tesis en la que desarrollará un modelo de machine learning para estudiar el desplazamiento de las partículas en el viento, el estudiante de doctorado en Ingeniería de Sistemas Complejos (DISC) de la Facultad de Ingeniería y Ciencias UAI (FIC), Mateo Concha, se adjudicó el concurso nacional “Tesis de doctorado en el sector productivo” de la ANID y fue reconocido como el proyecto mejor evaluado de la convocatoria.
Mateo Concha está realizando el proyecto en conjunto con la empresa Engie Energía Chile. En concreto se trata de un modelo de monitoreo de emisiones atmosféricas en la Unidad 3 de Ciclo Combinado de la Central Termoeléctrica de Mejillones, que analizará cómo las corrientes de viento “afectan la dispersión de contaminantes como dióxidos de azufre, óxidos nitrosos y material particulado provenientes de las chimeneas de las centrales termoeléctricas”, explica Concha.
Y agrega que “para una efectiva ejecución del plan nacional de descarbonización serán necesarios nuevos conocimientos, así como nuevos abordajes a los problemas generados por la industria energética al medioambiente. Demas está recordar lo ocurrido en Ventanas-Puchuncaví, en que el mal manejo de las emisiones contaminantes puso a la bahía de Quintero en un estado de crisis ambiental y sanitaria”.
Cuenta que se interesó por la temática, ya que durante el desarrollo de su Master of Science in Bioengineering, también en la FIC, conoció “una forma nueva de enfrentar el impacto ambiental de las industrias (…). Salió a la luz que la regulación ambiental no era lo suficientemente efectiva para controlar las emisiones contaminantes, ya que los modelos de simulación de emisiones establecidos en los años 90´s no daban abasto para abordar todos los cambios climáticos y requerimientos operacionales de los últimos años, traduciéndose en la posibilidad de implementar una metodología matemática novedosa para atacar un problema regulatorio ambiental”.
Concha explica que ganar el concurso “fue increíble. En primer lugar, por el hecho de haber obtenido el mejor puntaje de entre todos los postulantes. Y, en segundo lugar, por la oportunidad de contar con los recursos para desarrollar con un apoyo extra mi investigación. Este financiamiento me permitirá viajar a realizar experimentos de campo, contar con información en tiempo real de concentraciones de contaminantes, así como con los softwares de modelamiento de calidad de aire validados por la EPA (Environmental Protection Agency USA)”.
También sostiene que posiblemente la investigación se pueda proteger con alguna de las alternativas que la ley permite, y espera que esta metodología se presente a la Superintendencia de Medio Ambiente como una metodología de monitoreo de emisiones, acercándola a una potencial formalización como futuro decreto supremo. Por eso, concluye: “Es un orgullo esta adjudicación, ya que significó la validación de la importancia que tiene esta investigación para nuestro país”.