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¿Cómo enfrentar el aislamiento social?

Claudio Araya, profesor de Psicología entrega guía para estudiantes de intercambio en la UAI.

19 de marzo de 2020

A raíz de la contingencia producida por el Coronavirus y como medida preventiva, la UAI decidió suspender las actividades académicas presenciales. En consecuencia, todos los cursos pasaron a modalidad online y la recomendación para los estudiantes es mantenerse en sus casas para no exponerse a riesgos innecesarios.

Esta nueva modalidad de cuarentena y aislamiento social, ha generado ciertas preguntas: ¿es mejor seguir una rutina todos los días dentro de la casa? ¿qué tipo de ejercicios o prácticas nos sirven para hacer más llevadero el encierro? Claudio Araya, profesor de la Escuela de Psicología UAI y Director del Diplomado en Mindfulness Relacional y Prácticas del Bienestar, respondió las interrogantes y entregó algunos tips para estudiantes internacionales. 

“Es importante recordar que la cuarentena y el encierro no es sinónimo de aislamiento social, es valioso conectar con nuestros seres queridos mediante diferentes medios tecnológicos, que nos ayuden a mantenernos vinculados”.
  • ¿Cuánto afecta en nuestra salud mental este distanciamiento?

Las condiciones de cuarentena pueden ser vividas de maneras muy diferente. La experiencia es muy diferente si se está estudiando o trabajando (o ambas), o si se está acompañado, o si hay más personas con nosotros. Aunque pueda parecer obvio, estar en cuarentena y en aislamiento en nuestras casas no es sinónimo de aislamiento social, quizás tengamos que hacer un esfuerzo para mantener vinculados con nuestros seres queridos, y que podamos compartir como estamos. Estas nuevas condiciones pueden abrir nuevas posibilidades.

A pesar de estar en casa podemos conectarnos con nuestros seres queridos, familiares y amigos mediante medios tecnológicos, los cuales nos pueden ayudar a estar vinculados unos con otros, a pesar de estar en nuestros hogares.

  • ¿Es importante mantener una rutina o armar una dentro de la casa?

Somos lo que hacemos, y nuestros hábitos definen enormemente nuestro bienestar. Cuando vivimos cambios bruscos, como los que estamos sufriendo, nos vemos obligados también a modificar nuestras rutinas, probablemente pasaremos por un periodo de desajuste y reajuste, donde es importante mantener la calma y desarrollar nuevas rutinas que nos resulten saludables, donde podamos equilibrar los tiempos, desarrollando espacios de trabajo, pero también espacios de descanso, de conexión social y de actividad física. Estas rutinas saludables pueden contribuir enormemente al bienestar.

  • ¿Qué ejercicios se pueden hacer para que el encierro no pase la cuenta?

Quizás la primera pregunta que podríamos hacernos es: ¿Cuáles prácticas físicas o psicológicas ya nos han ayudado antes a sentirnos bien?, creo que cada uno tiene su propia respuesta, y el tiempo en que estamos puede ser una oportunidad para retomar alguna de ellas. Por ejemplo: escuchar música, meditar, hacer yoga, escribir. Etc. Etc. En el caso de la actividad física, será necesario adecuarlo al espacio en casa que tengamos.

  • ¿Desde la psicología qué recomiendas?

Prácticas de meditación y mindfulness contribuyen al bienestar y a nuestra regulación emocional, también las prácticas de yoga, pilates, etc. Hoy hay recursos tecnológicos que pueden favorecer que nos mantengamos con actividades en el hogar.  Prácticas de mindfulness por ejemplo, guiadas mediante audios o apps, sesiones de yoga online, etc. Lo más relevante es buscar una actividad que se adecue a la propia realidad. La Escuela de Psicologia de la UAI ofrece un espacio de práctica de mindfulness gratuito. Hoy dia se realiza via online los dias lunes entre 13 y 14 horas. (conexión via Zoom a: https://zoom.us/j/6155385879) por si quisieras sumarte.

  • ¿Qué opinas de la sobreexposición a la información? ¿Es también problemático en este tipo de situaciones?

La sobreexposición puede ser un problema en cualquier instante, y más aún en las condiciones en que estamos. Por supuesto que es valioso y necesario estar informados, y es valioso elegir las fuentes y sobre todo el tiempo de exposición a los medios de información. Reconociendo que en algunos momentos podemos sentirnos saturados y necesitar hacer pausas. La clave puede ser elegir bien cuando y cuanto tiempo estar expuestos a la información.

  • ¿Cuáles son tus recomendaciones para los estudiantes internacionales que están viviendo muchos procesos en poco tiempo y lejos de sus familias?
Me parece que lo principal es mantener la calma, estamos viviendo un proceso social inesperado en gran parte del planeta, y ante la incertidumbre es bueno no tomar decisiones apresuradas e ir realizando pequeñas acciones que contribuyan al bienestar propio y de otros..

Me parece valioso recordar que la cuarentena y el quedarnos en casa no es sinónimo de aislamiento social, que es valioso conectar con nuestros seres queridos mediante diferentes medios tecnológicos, que nos ayuden a mantenernos vinculados.

También puede ser valioso tener presente que la situación que vivimos escapa en gran medida de nuestro control, y que es necesario ajustarnos de manera saludable ante el cambio repentino de nuestras condiciones de vida. También reconocer que es natural un sentir malestar, y que este cambio puede ser  también una oportunidad para desarrollar rutinas que brinden bienestar. – Algunas medidas puede ser: Elegir bien lo que se va a realizar, leer, meditar, hacer deporte, hablar con amigos y seres queridos, cuidar la dieta y los contenidos audiovisuales, dormir al menos 6 horas al día, ofrecer apoyo social a quienes lo requieran, si está a nuestro alcance hacerlo.

Esta pausa puede ser generativa si estamos conscientes de nosotros mismos y de los demás.

19 de marzo de 2020

A raíz de la contingencia producida por el Coronavirus y como medida preventiva, la UAI decidió suspender las actividades académicas presenciales. En consecuencia, todos los cursos pasaron a modalidad online y la recomendación para los estudiantes es mantenerse en sus casas para no exponerse a riesgos innecesarios.

Esta nueva modalidad de cuarentena y aislamiento social, ha generado ciertas preguntas: ¿es mejor seguir una rutina todos los días dentro de la casa? ¿qué tipo de ejercicios o prácticas nos sirven para hacer más llevadero el encierro? Claudio Araya, profesor de la Escuela de Psicología UAI y Director del Diplomado en Mindfulness Relacional y Prácticas del Bienestar, respondió las interrogantes y entregó algunos tips para estudiantes internacionales. 

“Es importante recordar que la cuarentena y el encierro no es sinónimo de aislamiento social, es valioso conectar con nuestros seres queridos mediante diferentes medios tecnológicos, que nos ayuden a mantenernos vinculados”.
  • ¿Cuánto afecta en nuestra salud mental este distanciamiento?

Las condiciones de cuarentena pueden ser vividas de maneras muy diferente. La experiencia es muy diferente si se está estudiando o trabajando (o ambas), o si se está acompañado, o si hay más personas con nosotros. Aunque pueda parecer obvio, estar en cuarentena y en aislamiento en nuestras casas no es sinónimo de aislamiento social, quizás tengamos que hacer un esfuerzo para mantener vinculados con nuestros seres queridos, y que podamos compartir como estamos. Estas nuevas condiciones pueden abrir nuevas posibilidades.

A pesar de estar en casa podemos conectarnos con nuestros seres queridos, familiares y amigos mediante medios tecnológicos, los cuales nos pueden ayudar a estar vinculados unos con otros, a pesar de estar en nuestros hogares.

  • ¿Es importante mantener una rutina o armar una dentro de la casa?

Somos lo que hacemos, y nuestros hábitos definen enormemente nuestro bienestar. Cuando vivimos cambios bruscos, como los que estamos sufriendo, nos vemos obligados también a modificar nuestras rutinas, probablemente pasaremos por un periodo de desajuste y reajuste, donde es importante mantener la calma y desarrollar nuevas rutinas que nos resulten saludables, donde podamos equilibrar los tiempos, desarrollando espacios de trabajo, pero también espacios de descanso, de conexión social y de actividad física. Estas rutinas saludables pueden contribuir enormemente al bienestar.

  • ¿Qué ejercicios se pueden hacer para que el encierro no pase la cuenta?

Quizás la primera pregunta que podríamos hacernos es: ¿Cuáles prácticas físicas o psicológicas ya nos han ayudado antes a sentirnos bien?, creo que cada uno tiene su propia respuesta, y el tiempo en que estamos puede ser una oportunidad para retomar alguna de ellas. Por ejemplo: escuchar música, meditar, hacer yoga, escribir. Etc. Etc. En el caso de la actividad física, será necesario adecuarlo al espacio en casa que tengamos.

  • ¿Desde la psicología qué recomiendas?

Prácticas de meditación y mindfulness contribuyen al bienestar y a nuestra regulación emocional, también las prácticas de yoga, pilates, etc. Hoy hay recursos tecnológicos que pueden favorecer que nos mantengamos con actividades en el hogar.  Prácticas de mindfulness por ejemplo, guiadas mediante audios o apps, sesiones de yoga online, etc. Lo más relevante es buscar una actividad que se adecue a la propia realidad. La Escuela de Psicologia de la UAI ofrece un espacio de práctica de mindfulness gratuito. Hoy dia se realiza via online los dias lunes entre 13 y 14 horas. (conexión via Zoom a: https://zoom.us/j/6155385879) por si quisieras sumarte.

  • ¿Qué opinas de la sobreexposición a la información? ¿Es también problemático en este tipo de situaciones?

La sobreexposición puede ser un problema en cualquier instante, y más aún en las condiciones en que estamos. Por supuesto que es valioso y necesario estar informados, y es valioso elegir las fuentes y sobre todo el tiempo de exposición a los medios de información. Reconociendo que en algunos momentos podemos sentirnos saturados y necesitar hacer pausas. La clave puede ser elegir bien cuando y cuanto tiempo estar expuestos a la información.

  • ¿Cuáles son tus recomendaciones para los estudiantes internacionales que están viviendo muchos procesos en poco tiempo y lejos de sus familias?
Me parece que lo principal es mantener la calma, estamos viviendo un proceso social inesperado en gran parte del planeta, y ante la incertidumbre es bueno no tomar decisiones apresuradas e ir realizando pequeñas acciones que contribuyan al bienestar propio y de otros..

Me parece valioso recordar que la cuarentena y el quedarnos en casa no es sinónimo de aislamiento social, que es valioso conectar con nuestros seres queridos mediante diferentes medios tecnológicos, que nos ayuden a mantenernos vinculados.

También puede ser valioso tener presente que la situación que vivimos escapa en gran medida de nuestro control, y que es necesario ajustarnos de manera saludable ante el cambio repentino de nuestras condiciones de vida. También reconocer que es natural un sentir malestar, y que este cambio puede ser  también una oportunidad para desarrollar rutinas que brinden bienestar. – Algunas medidas puede ser: Elegir bien lo que se va a realizar, leer, meditar, hacer deporte, hablar con amigos y seres queridos, cuidar la dieta y los contenidos audiovisuales, dormir al menos 6 horas al día, ofrecer apoyo social a quienes lo requieran, si está a nuestro alcance hacerlo.

Esta pausa puede ser generativa si estamos conscientes de nosotros mismos y de los demás.