Los riesgos en contra de la recuperación económica del país han aumentado considerablemente. Destaca el reciente anuncio de Estados Unidos respecto de retirarse unilateralmente del acuerdo sobre Irán. A estas tensiones geopolíticas se agregan las tendencias proteccionistas. Las perspectivas de mejora siguen apoyadas en cuán eficaz resulte la expansión fiscal de Donald Trump y la estabilidad de las economías china y europea. Ya hemos observado alzas importantes en el precio del petróleo y presiones en nuestro tipo de cambio, que señalan que los efectos de estos shocks ya se están manifestando claramente.
Frente a un entorno que se ha vuelto más incierto, resulta fundamental fortalecer la credibilidad y responsabilidad de nuestra política fiscal. El desafío de la convergencia al balance estructural es hoy más urgente.
Publicado en Diario Financiero.